Posted in Papelería y organización

Buenos hábitos junto a papeles

¡Hola a todos! Hoy estoy aquí para comentaros un par de buenos hábitos que podemos ir adquiriendo y forman parte de mi día a día, delante de un papel. ¡Empecemos!

Leer

Este es el más básico y recomendado. Leer es un muy buen hábito, de lo que sea: cultura, autoayuda, libros técnicos sobre algo que te aficione, biografías de tus ídolos… lo que sea.

Bien es cierto que hoy en día hay muchos libros en versión digital, podéis decantaros por esa opción. Y he de decir que aunque yo también leo de esa manera, se me hace mucho más cómodo y agradable un libro en papel.

Sea como sea, recomiendo leer porque tiene muchas ventajas y es un trabajo mental que, a día de hoy no os puede parecer difícil, pero que en el futuro, mantener ese hábito de lectura puede ser muy bueno para vuestra salud (cosa que un podcast o un vídeo… no tanto), además de que implica adquirir cultura y familiarizarse con mucho vocabulario y hace también mejorar la expresión oral (si lees en voz alta) y escrita.

Todo son ventajas y aunque pueda darte pereza al principio o no seas muy de leer, cuando te enganchas a un libro, no lo quieres soltar.

Diario de agradecimientos

Las siguientes funciones están más relacionadas con la escritura y esta en concreto trata de que todos los días por la noche escribas 3 cosas que son buenas, por muy insignificantes que parezcan. Pueden ser: la luz no se ha ido, he bebido bastante agua, he chateado con mis amigos… lo que sea, pero todos los días te puedes apuntar tres cosas. Puedes cambiarlo por una sola, o por cinco, si quieres, pero todos los días han de ser la misma cantidad. Lo recomendable son tres.

Con este hábito conseguirás valorar más lo que no valoras en tu día a día y tal vez mantengas un mejor estado de ánimo habitualmente y si en algún momento estás desanimado por una única razón, puedes recurrir a la lectura de este diario para animarte.

Páginas matinales

Este hábito es recomendado por el libro “El Camino del Artista” de Julia Cameron y se trata de escribir todos los días al levantarte 3 páginas, ni más, ni menos. Y no debes mirarlas hasta pasados unos meses.

Si no tienes inspiración ese día, no pasa nada, puedes llenar las páginas con “no sé qué escribir” repetido muchas veces.

Con esto conseguirás el evitar empezar el día deprisa y corriendo. En puesto de eso, lo que tendrás es un momento inicial de calma y tranquilidad para pararte a pensar y soltar tus pensamientos. Esto te dará serenidad para el resto del día.

Planificación

No importa si no eres de agenda… yo soy partidaria de que la productividad implica apuntarlo prácticamente todo, porque si no se te puede olvidar. No hablo solo de que te apuntes las citas médicas, reuniones, eventos, etc., sino también de que te apuntes todo lo que pase por tu cabeza de “luego tengo que…” porque si no, es muy fácil que esa tarea caiga en el olvido con otras distracciones y cuando estés en la cama pienses “¡Anda, no he hecho esto!”… para evitar esa situación incómoda, apuntalo y tenlo a la vista.

Creatividad

Suelta lo que llevas dentro, lo que pase por tu cabeza. Lo que sea: una frase, un dibujo, un mapa conceptual, cualquier cosa que pase por tu cabeza. Es muy probable que próximamente sea útil para ti, aunque de primeras no lo aparente. Si no lo apuntas, caerá en saco roto y lo olvidarás con el tiempo.

Y si te gusta, puedes considerar un momento de relajación para pintar, colorear o dibujar. Estar delante de un papel en blanco no debe implicar escribir, también es dar rienda suelta a la imaginación. Dedica aunque sea 2 o 3 minutos al día a hacer esto, a soltar lo que llevas dentro.

Desconexión

Antiguamente el mundo digital servía para desconectar del entorno que nos rodea, hoy en día para muchas personas es todo lo contrario: el entorno que nos rodea sirve para desconectar de las tecnología.

Por lo tanto, es muy buena opción salir, tomar el aire, andar un poco y luego sentarte en un banco o junto a un árbol a leer, escribir, dibujar, pintar… lo que quieras, pero deja las pantallas y máquinas un poco y desconecta de ellas, el rato se hará más ameno y tal vez aún más relajante, gracias a esos papeles que tienes contigo. Haz esto un ratito al día para dejar de lado las pantallas, puede ser 10 o 15 minutos, no hace falta más.

Yo trato de poner todos ellos en práctica cada día y no me quitan demasiado tiempo… puedo tirarme como mucho, media hora distribuida a lo largo del día, no me lleva más tiempo.

¿Qué opináis de estos hábitos? ¿Os gustaría practicar alguno de ellos? ¿Cuáles añadiríais a la lista? Dejádmelo en los comentarios.

Nos vemos pronto…

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *